Gastronomia Mexicana

Gastronomia Mexicana
Comida Mexicana

miércoles, 16 de octubre de 2013


PAN DE MUERTO.


El pan de muerto, que es para los mexicanos un verdadero placer, tiene su origen en la época de la Conquista, inspirado por rituales prehispánicos, y hoy en día es uno de los componentes más importantes de las ofrendas dedicadas a los Fieles Difuntos.

Las poblaciones mexicanas especialmente del centro y sur del país han tenido un gusto particular por ese pan de fiesta, pan dedicado a los difuntos que regresan a reencontrarse con sus familias el 31 de octubre, 1 y 2 de noviembre, de acuerdo con la tradición de "Día de Muertos" que se ha heredado de generación a generación desde hace varios siglos.

Esta es una receta de como hacer pan de muerto, para que en estos días nosotros podamos ponerlo en la ofrenda que se acostumbra cada año en esta costumbre mexicana.


Ingredientes


4 1/2 a 5 1/2 tazas de harina para todo uso y harina adicional, uso dividido
1/2 taza de azúcar granulada
1 cucharada de semillas de anís
1 cucharadita de sal
2 paquetes (1/4 de onza cada uno) de levadura seca de crecimiento rápido
2/3 taza (lata de 5 fl. oz.) de leche evaporada NESTLÉ CARNATION Evaporated Milk
1/3 taza de agua
1/2 taza (1 barra) de mantequilla, cortada en pedazos
4 huevos grandes ligeramente batidos
GLASEADO

1/2 taza de azúcar granulada
1/3 taza de jugo de naranja
Azúcar granulada o de molido grueso



PARA PREPARAR LOS PANES:

COMBINA en un tazón para mezclar grande 1 1/2 taza de harina, 1/2 taza de azúcar, las semillas de anís, la sal y la levadura. Calienta la leche evaporada, el agua y la mantequilla a fuego bajo en una cacerola de tamaño mediano hasta que la temperatura de la mezcla alcance de los 115º a los 120º F y se derrita la mantequilla. (Si está demasiado caliente, déjala enfriar un poco antes de agregar los ingredientes secos.) Forma un hueco en el centro de la mezcla de harina; vierte en él la mezcla de leche. Revuelve esto con una batidora eléctrica a velocidad media hasta obtener una consistencia homogénea. Agrega los huevos y 1 1/2 taza de harina; mézclalos bien. Agrega poco a poco (de 1/2 taza en 1/2 taza) de 1 1/2 a 2 1/2 tazas de harina restante, mezclándola bien cada vez que añadas más hasta conseguir que la masa tenga una consistencia homogénea pero que no sea pegajosa. (Es posible que no necesites toda la harina.)

coloca la harina en una superficie ligeramente enharinada; amásala de 10 a 15 minutos o hasta que quede moderadamente dura y elástica y que tenga una consistencia homogénea. Puede ser que se necesite más harina para evitar que quede pegajosa. Coloca la masa en un tazón engrasado de tamaño grande; dale vuelta. Tápala con un envoltorio plástico engrasado. Déjala crecer a temperatura ambiente de 60 a 75 minutos o hasta que duplique el tamaño.

Aplasta la masa golpeándola con el PUÑO. Corta la masa en 4 porciones iguales para preparar 3 "barras" y dejar 1 para la decoración. Trabaja la masa sobre una superficie ligeramente enharinada según sea necesario y forma bollos redondos con 3 de las porciones. Colócalos en la(s) bandeja(s) para hornear que hayas engrasado. Mantén tapadas con envoltorio plástico engrasado todas las porciones de la masa a fin de evitar que se sequen. Forma 3 bolitas, lágrimas, trenzas y/o huesos con la porción restante de la masa. Decora los bollos redondos colocándoles 1 bolita encima y rodeando la misma con las decoraciones restantes. Hazles cortes a las decoraciones y a cada uno de los bollos por donde se les van a colocar para que se peguen bien. Pégalas humedeciéndolas con agua. Tapa los bollos con un envoltorio plástico engrasado. Deja que crezcan a temperatura ambiente durante otros 30 minutos o hasta que dupliquen su tamaño.

precalienta el horno a 350º F. Prepara el Glaseado mientras tanto. Combina 1/2 taza de azúcar y el jugo de naranja en una cacerola pequeña. Haz que hierva la mezcla a fuego medio. Sigue cocinándola, revolviéndola con frecuencia, por unos 5 minutos hasta que se forme el almíbar (sirope). (Puede ser que burbujee la mezcla; si esto ocurre, retira la cacerola del fuego, revuélvela y ponla de vuelta sobre el fuego.) Retira la cacerola del fuego.

hornea los bollos durante 20 minutos. Úntales el almíbar con un pincel. Espolvoréalos con el azúcar; ponlos de vuelta en el horno. Sigue horneándolos de 5 a 10 minutos más o hasta que estén bien doraditos y suenen huecos al darles un golpecito.

VARIACIÓN: Espolvorea los bollos con azúcar de colores.

La receta rinde para 3 bollos de pan.


Yo creo que es muy bonito cuando nosotros seguimos nuestras costumbres hoy en día como nuestros antepasados lo hacian. ☻

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